Supermala, Roberto Malo / XCAR Malavida

Llevo ya unos cuantos años metidos en el mundo literario como un intruso a la espera de que me detecten y me envíen fuera del círculo de una patada en las solapas. Quizá exagero. En modo alguno puedo considerar que esté dentro, más bien fisgoneo desde fuera, como una groupie, un maletilla o un mamporrero de Hollywood.
Ferias, San Jorges y eventos varios ponen mi nombre al lado de autores de verdad, y así me creo que soy su igual, cuando la realidad es que no dejo de ser un mediocre con ínfulas, pero no creo que engañe a nadie.
Sin embargo, eso me da oportunidad de conocer más de cerca su obra, incluso curiosear en comics que quizá nunca me hubiera parado a revisar si no tuvieran el nombre de Roberto Malo y XCAR Malavida en la portada. Y esta mamá Supermala me ha sorprendido por su aparente simplicidad, pero a la vez por su capacidad para transformar el vínculo entre madre e hija en una nueva forma de comprender el impacto hormonal del embarazo.
Es una obra sencilla, pero muy divertida; sin maldad, pero sarcástica en ocasiones; dulce, mas agria cuando se ejerce una segunda lectura más personal y se deja de lado el catálogo de amenazas que acechan a la protagonista.
Como otras obras de carácter casi biográfico, se disfrutan más cuando puedes sentirte plenamente identificado con los personajes, y aquí estamos hablando de una mujer embarazada, que un buen día se harta de tanta maldad en el mundo y se da cuenta de que tiene superpoderes, los que le brinda su hija nonata. Pero no os preocupéis, los demás también la podéis disfrutar aunque no estéis embarazados.